14/06/2023
PHILIP WAECHTER, NUESTRO AUTOR DEL MES
Tras la entrega del Premio al Mejor Libro del Año 2022 en la categoría de álbum ilustrado otorgado por las librerías de Madrid, decidimos entrevistar al autor.
Han pasado semanas en las que Philip Waechter ha estado muy ocupado con nuevos proyectos, pero finalmente aquí tenéis la entrevista:
- Decía Laura Vila, de la librería Rafael Alberti, en la entrega de los premios que tus libros tienen la capacidad de "coger nuestro corazón, sentarlo en un sofá y ponerle una manta para que esté calentito y a gusto". ¿Este saber llegar desde la sencillez a adultos y a niños nos habla de ti mismo tanto como creemos?
-¡Oh! Laura Vila lo ha expresado realmente bien. A mí me resulta difícil describirme en ese sentido; lo dejo para las personas con las que estoy todos los días. Curiosamente, estas descripciones podrían aplicarse también a las obras de Jean-Jacques Sempé, a quien tanto admiro. Su forma de mirar a las personas, llena de empatía y comprensión incluso por todas sus debilidades y peculiaridades. Su mundo no es perfecto, pero siempre hay oportunidades y pequeñas islas de felicidad personal. Me alegra mucho si estas cosas también se reflejan de manera similar en mis dibujos.
- En algunos de tus libros como Un día con amigos, Yo o en las ilustraciones de Juan Oveja también quiere tener una persona nos abres la puerta a un mundo de animales sintientes que se relacionan con otros y con el mundo. ¿Humanizar estos animales nos anima a conectar más con el público infantil?
- Para mí es más bien una personificación de los seres humanos. Es principalmente una herramienta estilística, una forma de liberar la historia de la realidad y de la lógica. De esta manera, creo un entorno en el que todo es posible y, aun así, sigue siendo creíble utilizando recursos simples.
Por ejemplo, si pongo a un zorro con un traje de astronauta y lo hago volar a la luna en un cohete, generalmente no se cuestiona, porque está claro que me estoy moviendo en un mundo de pura fantasía. Además contar historias con personajes animales me ayuda a no tener que responder algunas preguntas que tendría que aclarar en historias con personajes humanos. ¿Cuántos años tiene el niño? ¿Es niña o niño? ¿Qué pasa con los padres del niño, etc, etc.?
Por lo tanto esta decisión es también una forma de simplificación y abstracción que me ayuda a contar lo esencial de una historia. Y, por supuesto, a los niños les encantan los animales como personajes principales, de eso no hay duda.
-En Días de hijo nos hablas de la realidad de la paternidad de una forma presente y no edulcorada. Este es otro de tus álbumes en los que podemos encontrar los dos niveles de lectura. ¿En tu proceso creativo piensas en el posible destinatario de tus libros? ¿Crees que debes abordar el libro con un registro diferente si es un libro para niños? En definitiva, ¿crees que existe o debe existir una barrrera entre los libros para niños y para adultos?
-Al dibujar y escribir mis libros no estoy pensando constantemente para quién está destinado mi libro. En general, quiero crear libros para niños y adultos y, por supuesto, también hago mis libros para mí mismo. Quiero disfrutar y deleitarme con lo que hago, pensando también en el niño que fui y en lo que le habría gustado a ese niño. Quiero hacer libros que, idealmente, tengan un significado intergeneracional y que puedan contarnos algo a todos. Para mí es realmente importante contar algo desde la experiencia y del mundo, incluso del mundo emocional de los niños, en un lenguaje que puedan entender. Días de hijo es una excepción. Este libro se dirige principalmente a adultos, a nosotros, los padres, incluso si los niños pueden reconocerse y encontrarse en situaciones dentro del libro.
- Hay un detalle que no podemos dejar pasar y queremos aprovechar esta entrevista para hablar del color. Tus paletas de color son un hilo conductor en la misma historia. Su calidez nos lleva a un mundo acogedor y seguro. ¿Trabajas previamente la ilustración en blanco y negro y luego trabajas el color? ¿La historia ya tiene una paleta en tu mente antes de que la lleves al papel?
- Sí, primero dibujo todas las imágenes con un dibujo de tinta negra antes de hacer copias que luego coloreo. Utilizo diferentes lápices de colores y rotuladores, las áreas más grandes las difumino con una esponja, todo de manera muy tradicional en papel.
Durante bastante tiempo, he estado trabajando con mis lápices y una cantidad limitada de colores, y ahora sé qué tonalidades se adaptan bien a mí. Por lo tanto, ya tengo en mente una paleta de colores específica al esbozar un libro. A menudo logro plasmar esas ideas en papel, pero a veces no. El hecho de que coloree las copias en blanco y negro me permite tener infinitas oportunidades de cometer errores, de no acertar con los colores y de poder intentarlo una y otra vez.
-Hace poco leímos en instagram que el primer protagonista de Yo fue un cerdo. ¿Nos puedes decir quién o qué te llevó a la creación de Yo? ¿Cómo fue el proceso hasta llegar a la versión definitiva que conocemos? ¿Es el mismo oso que años después nos encontramos en Un día con amigos? ¿Es la verdadera amistad y su importancia en la vida un punto fuerte en tus historias?
-Yo fue originalmente un regalo de Navidad para mi esposa, un libro mal copiado y mal encuadernado. El oso no era un oso, sino un cerdo, el título era diferente y tenía menos contenido. Sin embargo, el regalo tuvo el efecto deseado y, después de unos meses, una vez que mi esposa se recuperó de la emoción, me dijo que debería ofrecerlo a una editorial. Aunque era un regalo personal para ella, ella sentía que debía compartirlo con el mundo, que tenía más potencial que todo lo que había hecho antes. Lo enviamos a mi editorial, pero ellos lo rechazaron. Reflexionamos y lo revisé. El cerdo se convirtió en oso, pulí el texto, el título se convirtió en Yo y se amplió significativamente. Luego lo ofrecí a otra editorial, les gustó, pero querían recortarlo mucho. Nos mantuvimos firmes: todo o nada. Luego lo envié nuevamente a mi editorial, Beltz & Gelberg, ¡y ellos dijeron de inmediato sí! Es cierto que los osos aparecen una y otra vez en mis historias, pero nunca son los mismos. Cada oso es diferente, las historias, el tono de cada texto y los diferentes entornos hacen que cada oso sea un individuo. También el tema de la amistad aparece una y otra vez en mis libros, ya que siempre está presente, ya sea que estemos felices, enojados o solos, siempre está presente.
-Imaginamos que el trabajo en LABOR, rodeado de amigos y colegas de profesión es enriquecedor y entusiasta. ¿Nos puedes contar más sobre el gérmen de este proyecto y la experiencia de los niños con los workshops que realizáis?
-Fundamos el estudio hace más de veinte años. Todos éramos diseñadores gráficos de diferentes universidades que acabábamos de terminar nuestras carreras y queríamos trabajar de forma independiente.
Teníamos el deseo de no estar solos en nuestros escritorios en casa y buscábamos seguir teniendo intercambio diario, como lo que experimentábamos en la universidad.
Además, teníamos las consideraciones pragmáticas. Por razones económicas, queríamos adquirir, compartir y utilizar instalaciones, talleres y equipos conjuntamente. También nos pareció que la posibilidad de actuar juntos, realizar exposiciones, mostrarnos como grupo a las editoriales y al público, y presentarnos como una comunidad de taller que puede abordar diferentes estilos y temas, sería una ventaja enorme.
Todas estas consideraciones se confirmaron a lo largo de los años. La colaboración entre nosotros se hizo cada vez más intensa, surgieron los primeros libros en conjunto y realizamos numerosos talleres para niños. Todos nos hemos beneficiado mucho mutuamente, nos consideramos un equipo en lugar de competidores y, ya en nuestra primera exposición conjunta para la apertura de nuestro estudio en 1999, sentimos la fuerza y las oportunidades que se despliegan cuando muchas personas con ideas, enfoques y estilos diferentes, pero con deseos similares, se unen.
- Y para finalizar y hablando del álbum Muy famoso, y metiéndonos en el difícil terreno de los ídolos y los deseos aspiracionales de los niños, ¿qué podríamos hacer para, sin robarles la libertad y los propios sueños, aportar otras visiones que se alejen de lo que nos satura últimamente?
- Todos nosotros, pero especialmente los niños, necesitamos sueños, esperanza y visiones, pasión e interés por cosas que llenen nuestras vidas.
Creo que los adultos debemos transmitir a nuestros hijos (sin cerrar los ojos ante la realidad) que vale la pena tener sueños (preferiblemente durante toda la vida) y perseguirlos. Debemos animarles a escuchar sus sentimientos y confiar en sus fortalezas.
Los adultos debemos intentar demostrarles y transmitirles, aunque a veces parezca casi imposible, que vivimos en un mundo maravilloso, que podemos contribuir a darle forma y que siempre es posible probar cosas nuevas, cambiar nuestras vidas. Creo que esa es nuestra tarea, en nuestros libros y en nuestra convivencia diaria.